Los tostones son muy populares en Venezuela, se podría decir que son como una versión latina de las papas fritas o «potato chips». Se pueden comer como acompañantes de cualquier comida, cubiertos con carne mechada o ceviche, o simplemente comerlos rociados con un poco de sal. Mi versión favorita es la que nos preparaba mi abuela: cubiertos con salsa rosada (mezcla de salsa ketchup y mayonesa) y queso blanco rallado. Los ingredientes son bien sencillos, solo se necesitan plátanos verdes, aceite vegetal y un poco de sal. Acá tienen la preparación:
Pelar los plátanos y picarlos en rebanadas gruesas:
Colocar suficiente aceite en un caldero y freír los plátanos hasta que empiecen a dorar, sacarlos del aceite y colocarlos sobre papel absorbente para escurrir el exceso de aceite:
Aplastar cada rodaja de plátano para crear el tostón; yo utilizo envoplast (plástico transparente para envolver) y me ayudo con un rodillo de madera, pero se puede utilizar cualquier implemento: por ejemplo una piedra de pisar, o simplemente un plato colocado encima y sobre el cual se hace presión. Hay que tener cuidado de no aplastarlos demasiado para evitar que se deshagan.
Volver a colocar los tostones en el aceite y freír hasta dorar:
Colocar sobre papel absorbente para escurrir el exceso de aceite, colocarles un poco de sal por encima y servir:
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